Souvenires y papeles rotos

I

Pordioseros de la noche. El silencio y la violencia de los actos. Un suburbano camina entre la barbarie. Soy el dios de lo putrefacto y lo artificial. ¿Quién pidió una hamburguesa doble? La cultura se pudre o se ha podrido.

IV

Por qué yo no soy dios? Técnicamente yo hice más merito que él para serlo. Esa es la mayor injusticia de todo el universo, que después de 600.000 horas de vida, el hombre diga “bueno, eso era todo”. Es tremendamente injusto, dios, por qué yo no soy inmortal?. El tiempo es tan poco, no ser igual a él, nuestra vida dura sólo 2 minutos; y por ende, todo es en vano. La gloria, el placer y la alabanza. Todo es efímero, y dura lo que dura la risa de dios. Por qué no me tocó a mí serlo? por qué él?.

X

-Heredamos lo peor de la historia.
-Qué cosa?
-Esa sensación de impotencia. No podemos hacer nada ni lo vamos a hacer.
-No vas a cambiar el mundo. Enténdelo, no podes.
-Ya se pero...
Sino lo puedo cambiar, no me puedo quejar.
No lo puedo hacer.
Exhibir el dolor sin ninguna búsqueda o razón.
Quiero combatir dragones,
o a los ejércitos de Napoleón,
pelear por mi supervivencia en el Holocausto,
planear una revolución.
Cuan distinta nos dejaís la historia?!
-Ah?
-No quiero ser un tonto más que añora el pasado.
No quiero pero necesito luchar.
Justificar mi vida o mi comodidad.
Emprender que algo surja de mí
y no esta dialéctica del estate quieto.
Porque no podemos empezar de nuevo,
soñar sideralmente,
que nos impide volver a resurgir
todo lo que hemos olvidado
lo que hemos tirado por la borda por considerarlo inecesario
Alguien nos dirá que no?
Quien puede negarle a un mortal, su motivo, o su razón para vivir.
-Sabés que no se puede, es la época.
-La época.

Conversaciones entre Sabina y Franz

Franz:
Este amor
que es sólo un invento de Occidente
del siglo XIV,
Este amor
que no existió
ni existirá en todas las culturas.
El amor
que es sólo una construcción,
barata,
que intentó desplazar
los vínculos vasallales
feudales
los vínculos que tenían
los caballeros
con sus señores.
Con este amor,
Estomacal
genital-respiratorio
Con este amor que empieza
con mis dedos atravesando
tu pelo (negro),
cuando te sueño vestida con el manto de la Virgen de Lujan.
Con este amor,
invento,
constructo,
barato,
genital-virginal,
vestido a la antigua.
Con este amor es con quien me levanto,
me sepillo los dientes,
subo al subte,
escribo un par de tonterías.
Sos mi entidad abstracta
por la cual lucho
mi gran frase poética
con la cual he armado
todos mis ideales
vanos
huecos
vacíos pero vitales.
Este amor que es sólo
una transposición de las ideologías
a una persona que pasa a tener todas las virtudes
de poeticidad
de idealidad
de inexistencia.
Con vos, Sabina,
como entidad abstracta,
me levanto,
desayuno,
cocino,
juego a pensar cómo mis acciones te complacerían
cómo hacer de mi vida un objeto bello
para regalarte.
A vos,
Sabina,

Ora pro nobis
pecaturibus.

Azulejos azules y el fin de los grandes relatos

Este vez no me olvidé el saco. Camino por la avenida viendo pasar los colectivos vacíos. Me imagino que el fin de los grandes relatos es una película, y por qué no?. Digo imagino a todas las ideologías encarnadas en una mujer de una película de Hitchcock. La mujer está en la bañadera y de repente termina asesinada en el piso. Las fotos del lugar: una mujer de pelo rojo encontrada muerta, los azulejos azules y el contraste de la sangre. No tenemos más que hacer. Vivimos en el momento que se agotó la magia, se pinchó el globo. Las luces y los máquinas siguen funcionando, todo sigue funcionando. Y pensar que cada uno de los placeres que reproducen y que consumimos tuvo su lucha, que no repetiremos, y por ende, no merecemos el resultado. Mi boca puede decir más de lo que digo, yo puedo hacer más. Pero dónde están las razones?. A qué dios le voy a rezar a la noche? Y para qué? No necesito más bienes de consumo. Miro los autos pasar, dios recoge unos cartones en la esquina, las ideologías recién apuñaladas sangran en algún baño de Palermo. Lo bueno está pasado de moda.